Se terminaron las vacaciones... y esta es la sensación, con desenfoque incluido...
No me malinterpretéis, me encanta volver a casa... pero la perspectiva de todo lo que queda de verano sin otras vacaciones y con este bochorno... es bastante agobiante...
Y se termina mi excedencia, vuelvo al trabajo, a empezar una nueva etapa, post-bebé, post-estudios, post-vacaciones...
Y hemos vuelto con uno menos... Mateo se queda una semana de campamento. ¡Cómo se ha notado su ausencia ya en el viaje...!
Me gustan los cambios..., pero tantos juntos!
Pues valor y al toro! ;-)
ResponderEliminarVenga, que si has podido con todo lo que has hecho, con esto también!
Un besote!!!
Joer Rebe. Menos mal que tu estás hecha de buen palo. Porque a mí lo de los cambios no te me gusta nadiña, y me cuestan un huevo! Y si encima son ESOS cambios me da el parrús. No me extraña que el peke llore... En fin... despacito y con buena letra. Habrá que pensar en todos los buenos momentos que habeis tenido en estos días y los mucho mejores que quedan por llegar. Y bueno, tal vez la vuelta al trabajo hasta sea estupenda (me estoy auto-convenciendo, se nota no? jajaja!)
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