Estos días no tengo tiempo casi ni de estar con los peques. El mediodía es un ajetreo de preparar comida, dársela y acostarlos para la siesta, y por la noche llego y toca cena y a cama otra vez... Así que si pretendo hacerles foto les pillo en pijama!
Desde pequeñitos, los tres han demostrado una verdadera pasión por los libros. Ya de bebés, aunque sólo fuera para chuparlos y arrancar hojas, siempre se les veía con un libro en la mano... Y a David le encanta pasar las páginas una y otra vez, mientras va "contando" la historia a su manera...
Miguel tampoco se va a cama sin uno o dos libros, y no digamos Mateo, ahora que ya sabe leer!... (¡Ay, Mateo! ¡Cómo se le echa de menos!)
De todos modos, hoy la lectura debe estar de lo más interesante, porque este sigue así y no parece tener intención de dormirse... Además, con este calor, ¿quién puede???
Buenas (y esperemos que fresquitas) noches!
Nada si te vienes para aqui no tendras ni pizca de calor, hoy tuvimos que volver a los pantalones y a las chaquetas...que horror de tiempo! vuelta a la niebla de cada julio, ya era raro tanto calor!...y viento de donde quieras pero no de África, fresco, fresco...en cambio tus fotos siempre preciosas ;D Besos
ResponderEliminarPues por Coruña hace un calorcito hoy de lo más tremendo! Qué bien Rebe que les guste leer desde tan enanos!
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